jueves, octubre 31, 2013

"COVITE" CONTRA COSPEDAL ¡QUE LES SALVEN LOS SUYOS!

Carmelo Landa, figura destacada de antiguo del entorno etarra, fue uno de los firmantes de la citacion judicial por la que me vi acusado en Bélgica (en 1996) de incendio voluntario contra la sede de HB en Bruelas, de lo que me vi absuelto en tribunal por falta de pruebas. Sin que me llegara nunca el menor gesto de solidaridad de la Coordinadora por la paz -eurofuncionarios españoles con destino en Bruselas- pacifista y proxima de víctimas (democráticas) del terrorismo de la ETA (como "Covite")
El victimismo es como una segunda natura o ingrediente cultural esencial al menos de nuestros países occidentales marcados indeleblemente por un legado religioso de sello judeo/cristiano en mayor o menor medida todos ellos. En una guerra, las víctimas por definición ocupan siempre un puesto en la retaguardia, y en la ofensiva lanzada por el terrorismo en el país vasco en las últimas década en cambio, las víctimas se vienen arrogando con razón o sin ella un puesto en primera línea de su combate anti-terrorista (y pacifista y legalista y democratico)

He estado examinando un poco el "curriculum" de una de las asociaciones de victimas del País Vasco -"Covite"- que junto con otras asociaciones menores de víctimas habrán puesto ahora en la picota a la vicepresidenta del gobierno María Dolores Cospedal, exigiéndole públicas disculpas por haberles tratado de "ignorantes" en sus reacción -de la que aquí ya me hice eco- ante el abucheo (y gritos y pitidos) de los que se vieron víctimas los dirigentes del PP -ningún ministrro entre ellos- presentes en la concentracion de la plaza de Colón el pasado sábado. Doctores tiene la santa madre iglesia -léase el PP- y por lo tanto deben tener (y me consta que los tienen) sus celosos defensores, y no seré yo quien parta aquí una lanza en su favor, aqui todos ya saben, ni siquiera en defensa de la muy carismática número dos del partido, que no fuera para rendirle un homenaje de admiración personal como ya aquí lo hice. Y punto.

La asociación o colectivo que nos ocupa en cambio se me antoja que se merece aquí un pequeño juicio crítico. Se molestan ahora y dan por ofendidos, para comenzar, porque les traten no de traidores, ni de cobardes, ni de mentirosos siquiera u otra acusación infamante, sino de "ignorantes", lo que hace pensar que sea ahí donde les duela un poco el zapato, me explico, de creerse los mejor informados del mundo en la lucha anti-terrorista, y su susceptiblidad herida lleva fatalmente a pensar, es cierto, que se tratade gente muy bien informada, a la medida de unos servicios secretos -me refiero a los españoles- que se destacan de toda esa movida internacional sobre espionaje por cuenta de la Agencia Nacional de los Estados Unidos (NSA), como uno de los más y mejor informados del mundo a tenor de las declaraciones del jefe de aquella ante el congreso americano que puso en la picota a varios países occidentales -y sus servicios secretos- y en primer lugar de todos ellos (algo cuidadosamente silenciado en los medios españoles) a España por encima de Francia de Alemania e Italia.

Víctima del terrorismo lo fui yo en Bélgica que me vi envuelto en un proceso en el que los etarras (y sus cómplices directos) fueron parte interesada del lado de la acusación (personados con todas las de la ley, nombres y apellidos) Me vi acusado de tentativa -como aquí ya lo tengo relatado- de incendio voluntario contra la sede de HB en Bruselas (febrero del 96) y ninguna de esas asociaciones de víctimas, ni "Covite", ni la "Coordinadora por la paz" que funcionó en los años de la era Aznar aquí en Bélgica -y que mostraban todas las trazas de estar en estrecho contacto con familias y asociaciones de víctimas (por la campaña por ejemplo con la que dieron inicio a sus actividades en Bélgica, por cuenta de Publio Cordón y Ortega Lara)- me mostraron nunca el menor signo de solidaridad por nimio o disimulado que fuera, como si mi combate no fuera el suyo y viceversa

miércoles, octubre 30, 2013

MEMORIA ANTI-CRISTIANA LA MÍA

La garra hispanica que resucitó Ramiro era un símbolo anterior al cristianismo y su revindicacion en los tiempos modernos -o pos/modernos- cobra fatalmente pues un simbolismo pos/cristiano y anti-cristiano al mismo tiempo
A finales de octubre de cada año se ponen a soplar vientos de nostalgia entre algunos españoles -muchos, pocos- por cuenta de nuestra historia. Tiempo de memoria y de recordación y de nostalgia de lo que fue y también de lo que estuvo en un tris de ser y al final no fue, los meses de otoño (ya mediados) que atravesamos. La fundación de la Falange, el asesinato de Ramiro Ledesma Ramos y el de José Antonio más tarde y la muerte de Franco -en la misma fecha- vienen jalonando ese itinerario de la memoria con actos publicos cada vez menos concurridos e inciativas recordatorias del signo que sea, desde hace décadas.

Me acabo de embutir (mentalmente) ahora un video sobre la División Azul dentro de esa temperatura ambiental evocadora de la que me dejo embargar o contagiar cada año un poco como tantos otros, que me da hueso duro de roer (de nuevo) por los comentarios de los que intervienen en el reportaje, contrastados y nítidamente marcados al mismo tiempo de un espíritu claramente revisionista, surcado como pude ver de testimonios dispares que no dejaban de dar una sensación un tanto cacofónica entre los antiguos divisionarios que intervienen en el programa, de nombre ilustre algunos de ellos.

Los españoles fueron allí a pagar una deuda de guerra, a impedir la entrada de España en la segunda guerra mundial, fueron en un principio -lo que sólo en parte se fue remediando con el tiempo- bastante mal acogidos por sus aliados alemanes, congeniaban mucho más con los rusos prisioneros o de los territorios ocupados que con aquellos en definitiva y el reportaje y la retahila de comentarios se salda al final con una imagen un tanto agridulce de conjunto y el regusto amargo o mal sabor de boca de no saber (bien) responder a la pregunta de a qué fuimos (que me diga de a qué fueron)

Los muertos no hablan no obstante, y habría que empezar por preguntárlo, para poder responder de una forma clara, a los muchos que cayeron allí heroicamente y de forma absolutamente desinteresada. Está claro no obstante que la División Azul representa en la memoria colectiva de los españoles el cordón umbilical con una memoria de vencidos de la segunda guerra mundial que hace que recordemos algunos aquella como una memoria amiga, sin el menor complejo de culpa, de esos al menos que es capaz de barrer por completo una muerte heroicamente consentida.

martes, octubre 29, 2013

DIRIGENTES DEL PP ABUCHEADOS EN COLÓN

General Emilio Esteban Infantes, segundo jefe de la División Azul. Testigo de la derrota española en el 45 (piense Pío Moa lo que piense) A su vuelta de Rusia no le esperaba nadie en la Estación de Norte. Su ejemplo, el de la foto, legitima con creces la Cruz de Hierro que porté (a caso hecho) el 12 de octubre en Montjuich en la solapa. Un capítulo de nuestra historia que nos reviste algunos de credenciales y plantea en cambio al PP problemas insuperables y da la clave a la vez de sus amnesias y vacilaciones vergonzosas e inadmisibles

A riesgo de ganarme la furia descontrolada de feministas se me ocurre poder afirmar que la Política es una cosa, y la Mujer (con mayúsculas) otra muy distinta. Y el aforismo me viene de golpe a la mente por cuenta de María Dolores Cospedal y de sus recientes declaraciones sobre los abucheos (y gritos y pitidos) contra dirigentes de su partido, el PP, en la manifestación por las víctimas de la ETA en la plaza de Colón el pasado domingo. Admiré y sigo admirando la figura femenina de María Dolores de Cospedal como ya lo dejé sentado en algún articulo de mi blog (difunto) de Periodista Digital lo que no quiere decir que estuviese ni entonces ni ahora incondicionalmente de acuerdo con todas sus posturas o actitudes ni mucho menos con su línea política.

Y sus declaraciones de ahora en un tono no poco amargo y dolorido me mueven a reflexión sin dejar de seguir rendiéndole tributo de admiración como mujer y como persona y no como figura dirigente principalísima -con rango de "número dos"- de su partido. "Había muchas banderas pre-constitucionales" en Colón se queja la Cospedal ahora, mientras sale al quite de los tres emisarios oficiales del partido presentes en el acto, Esteban González Pons, Carlos Floriano y Javier Arenas, copiosamente abucheados e incluso directamente increpados por o grupos de jóvenes al final del acto.

Una alusión velada a algo que salta a vista aunque pocos se atreven a confesarlo en voz alta y sin tapujos y es el cisma latente (de antiguo) en el electorado de los populares e incluso en el aparato del partido en el poder, hasta ciertos niveles de responsabilidad y dirección al menos, entre su ala correcta (y demócrata y constitucional) y su ala incorrecta secretamente pre-constitucional y que a la menor ocasión destapa o saca a relucir sus veleidades populistas o por expresarlo en claro y crudo anti-demócratas, léase franquistas, falangistas, fascistas, neonazis, y otros calificativos más impresentables los unos que los otros, esgrimidos normalmente a modo de dicterio y englobados comúnmente en el lenguaje en vigor en los medios bajo el calificativo o común denominador de "fachas" (que con eso se creen que ya está dicho todo)

lunes, octubre 28, 2013

RESPUESTA ESTUDIANTIL EN SEVILLA SIGNO DE LOS TIEMPOS

Signo de los tiempos, la recuperación de una memoria amiga aunque no sea propiamente la nuestra. El emblema de este nuevo grupo estudiantil que acaba hacer hablar de él en Sevilla reproduce sustancialmente -en forma de aspa o de Cruz de San Andrés- el del movimiento fascista húngaro "Cruces de flechas" que se distinguieron heroicamente al lado de las Waffen-SS en el cerco soviético de Budapest (diciembre 1944-febrero 1945) Y me parece de perlas. Memoria hermana, la memoria heroica
¿Cambian los vientos y también los vientos en Andalucía? Es lo que cabe preguntarse tras los incidentes ayer por las calles del centro de Sevilla, que habrán sido teatro de una intervención enérgica y contundente de las fuerzas de orden contra manifestantes (jóvenes) de extrema izquierda, viéndose así acusados de hacer el juego de los organizadores de la manifestación que dio origen a las protestas de los izquierdista, otros jóvenes de la llamada "Respuesta Estudiantil" que pudieron continuar su manifestación -hecho histórico insólito (y que se me corrija si exagero) en cuarenta años de gobierno de la Junta de Andalucía, para una concentración de esas características- hasta el final como previsto.

¿Acaso esta cambiando el miedo de bando por tierras del Guadalquivir, en pueblos y ciudades andaluzas? En otros términos ¿está la calle al Sur de Despeñaperros dejando de ser feudo inatacable de izquierdas de todo pelaje a cual más totalitaria, más subversiva y anti-española y guerracivilista? A tenor de las reacciones de algunos, se diría que si, la del dirigente de izquierda Unida Gaspara Llamazares por ejemplo, que habrá puesto el grito en el cielo por lo que le parece una connivencia inadmisible de las fuerzas del orden con "los fascistas"

Es sintomático no obstante y significativo en extremo que precisamente la capital de la autonomía andaluza se vea teatro ahora de este brote de protesta consistente y significativo y de un signo políticamente (e ideológicamente) tan incorrecto, hasta el punto de hacerse oir a lo grande como lo habrán conseguido indiscutiblemente. Médico en Cádiz (o en La Laguna) boticario en Santiago, abogado en Granada, total nada, rezaba el dicho antiguo con el que se venía a zaherír así centros universitarios que a lo ojos de algunos se veían desprovistos de verdadera solera o tradición universitaria. Y Sevilla no se merecía mención siquiera no por que la Universidad fuera allí más joven o se viera menos acreditada, sino simplemente por que (prácticamente) no existía.

El tardofranquismo y sobre todo el régimen democrático cumplieron a rajatabla el lema de "universidad (como si fuera café) para todos", provocando una inflación que tiene sin duda no poco que ver con l actual crisis de la universidad pública. Los estudiantes "fachas" (para entendernos) de Respuesta Estudiantil llevaban desplegadas pancartas, durante la manifestación de ayer, en contra del actual ministro de Educación como haciéndose eco del malestar generado en el estamento universitario en contra de la reforma educativa encarnada en la nueva ley (LOMCE) por lo que tiene o puede tenor de ataque más o menos velado contra la Universidad pública.

domingo, octubre 27, 2013

Sueños de amor y de guerra (poesía en domingo)


"De profundis clamavit
anima mea domine"


Soy poeta, sí,lo asumo,
que si no, sin los sueños
excéntricos vistos de fuera
de un alma (ardiente) de poeta
no me hubiera sido posible
el saltar, tomar por asalto

contra todo lo creíble
las barreras que me encontré yo
(que me pusieron, que heredé)
y esas otras que levantaste tú
¡Niña bien, tan protegida
y rodeada de trincheras!


Desde el cansancio profundo
del hastío y el estupor
ante el vacío de un siglo
de un milenio en sus inicios,
el poeta de su tiempo,
tiempo -de profetas- recio,
entre tinieblas, tiempo feo,
manda recado de escribir
-como antes se decía-
a su mente y a su ego,
se pone a darle a la tecla
y en un rato de sosiego
-el que vence el desasosiego-
de pronto en lo hondo brota
el poema, como una flecha,
de otros tiempos y otras guerras,
de aquella guerra de Argelia
tan lejana y aún tan cerca
tan íntima, sí, tan nuestra
que nos acompañó en silencio
y gravitó de cerca en mi vida
en mis horas bajas (muertas)
¿La fuerza de lo posible
que intuyó Martin Heidegger?
Lo que pudo ser (¡en un tris!),
lo que no pasó a su tiempo
y por eso es que sigue ahí
sin pasar, esperando, sí,
que se le dé paso por fin,
y cuando llegue su hora
los que aguantaron la espera
pasarán (solos) con él.
Argelia fue francesa, sí ¿Y qué?
Y era y es nuestro horizonte
inmediato, nuestro,
ahí en frente, justo al lado
que divisamos de cerca
aunque pille tan lejano.
¡Qué claro y nítido lo vi
y qué fuerte que lo sentí
el verano aquél (en Motril)!
La guerra de Argelia
le hipotecó a Francia el futuro
-como nos lo gravó América
a nosotros mucho antes-,
y nos privó de horizontes
a muchos otros en cambio
¿Sueño insensato la OAS?
¡Un sueño puro, tan puro
que hizo soñar a los niños
como lo soñó el que esto escribe!
De horizontes espaciosos
como las noches del Sáhara
de cuando la Legión Extranjera,
de oficiales pies descalzos,
de cielos de noches frías
en los desiertos del Yemen
(que cantó aquel mercenario)
Y la muerte del sueño aquél
fue la de mi sueño también.
¡Enterrador de sueños me llaman,
nunca comprendí el por qué!
¿Que algunos merecen vivir
-sueños de vida o de muerte-
y que otros no lo merecen?
Así soy, el mismo que fui
hasta hoy, y siempre seré.
Mi vocación, sí, esa fue:
de enterrarlos dignamente
-a esos sueños desdichados-
lo menos que se merecen.
Y ojalá que de mi muerte
(cuando me toque o me llegue)
nazca el sueño que no muere.
O que lo vea nacer aún
surcando un campo de estrellas
mientras yo solo me pierdo,
libre y sin miedo a la noche.
Con mi buena estrella (¡y suerte!)
Plantándole cara a la muerte

sábado, octubre 26, 2013

¿JUAN CARLOS REY ABSOLUTO?

Genio y figura hasta la sepultura. Cristóbal Martínez Bordiú, marqués de Villaverde, hijo del conde Argillo y yerno de su Excelencia. Umbral dice en uno de sus libros que fue él quien tomó la decisión de interrumpir el tubo respiratorio de su suegro en la agonía, aquella fecha aniversario del 20 de Noviembre (...) Un marqués falangista, piedra de escándalo al final de sus días de otros miembros de una nobleza española bastante olvidadiza (casi tanto como la Iglesia)
(Por descuido involuntario omití en el momento de colgar esta entrada sus primeros párrafos sin los cuales se entiende mal todo lo que sigue, lo que me he apresurado en subsanar en cuanto que me di cuenta)

He estado envuelto en una discusión en los foros de Mancha Real el pueblo jiennense del que procedo por la vía paterna que por su duración y extensión muestra bien lo poco trivial del tema abordado, a saber al beatificación en el marco de la ceremonia de beatificaciones en masa de Tarragona hace ahora dos semanas de un eclesiástico del pueblo Francisco Solís Pedrajas asesinado al cabo de un año de guerra civil y tras haber caído el pueblo en zona roja (desde el principio hasta el final de la contienda) Peanas para todos o para ninguno así se puede resumir como lo hice en uno de mis mensajes la postura que habré venido defendiendo con ocasión de este nuevo santo (o beato camino de los altares) que espor lo que se pone de relieve ahora todo menos una figura indiscutida entre sus paisanos.

Y me refiero a los muertos del bando nacional ya fueran laicos o eclesiásticos, civiles o militares o simples ciudadanos que son los que me atañen directamente aunque solo fuera por aquello de que "a cada cual sus héroes y sus muertos" que decía Heiddeger. Viví desde niño bajo la aadvocación de este nuevo santo (mártir) de la persecución religiosa en la guerra civil y fue en la medida que la calle de la vivienda de mis familiares donde pasé mis veranos de infancia y de adolescencia llevaba su nombre y lo seguiría ostentando hasta hoy por la circunstancia nada trivial tampoco que fue el único que se salvó de la quema en el callejero del pueblo tras al transición de todos los caídos (por Dios y por España) del bando nacional durante la guerra.

Y por eso esté yo tal vez en mejor posición o me sienta con más fuerza moral que otros a la hora de poner al destape el simbolismo (tan sintomático) de la beatificación de un eclesiástico como la que nos ocupa y es el de la memoria selectiva y a rachas olvidadiza de una iglesia que tan pronto olvida como recuerda un pasado traumático y conflictivo y trágico y doloroso, en función de la coyuntura o de las circunstancias de tiempo y lugar o de la coyuntura política que España habrá venido atravesando en estos setentas años ya transcurridos de aquel conflicto fratricida.
Mancha Real, el pueblo de donde procedo por la vía paterna no es -favoritismos (legítimos) aparte- un pueblo cualquiera como sólo al cabo de los años habré acabado cayendo cabalmente en la cuenta. Un pueblo emblemático en extremo, en la historia de la guerra civil -por las sacas de abril del 37, de las mayores de la guerra después de las de Paracuellos- y en la historia del régimen anterior también por la circunstancia nada trivial de tratarse de la patria chica familiar y lugar de nacimiento de Cristobal Martínez Bordiú, yerno de Franco. En la foto, Franco en la puerta del cortijo de Arroyovil, en enero de 1966. A su derecha (a la izquierda en la foto), José Maria Martínez Ortega, conde de Argillo y padre del marqués, en el momento que recibia la Medalla de Oro de la Villa de Mancha Real. Algunos, a favor del nuevo clima estrenado en la Transicion pretendieron a todas luces suplantar, en la imagen (iconográfica) de gran bienhechor del pueblo y en la memoria colectiva de sus habitantes, al Caudillo por el Señor Conde (consorte)
En los años de la transición como no habré dejado de recordarlo en esta discusión de ahora, la Iglesia opto por el olvido ahora en cambio parece optar por una memoria selectiva ya digo y marcada de un sello fatalmente oportunista. La discusión larga ya digo y no poco animada y también un tanto cacofónica en esos foros digitales habrá derivado al final hacia la figura de Franco elegido a todas luces por alguno o alguno de chivo expiatorio con la intención de clausurar el debate sobre el nuevo santo (o beato) por las buenas, y a mayor gloria del nuevo santo francisco/solís, como un nevo santo de Asis (en versión española) por la imagen que habrán dado de él sus hagiógrafos y postuladores de alguien que en aquellos años de miseria y atraso se puso del lado de los pobres...al precio de enemistarse -en los meses (nota bene) que precedieron el estallido de la guerra civil (...)- con los terratenientes chivos expiatorios igualmente de ese compromiso de memorias que practica la iglesia española sobre la guerra civil (como ya lo tengo denunciado)

Y fue a lo que me opuse resueltamente optando en cambio por recordar todos los beneficios -en una enumeración a fe mía de lo mas extensa- que me habrá valido una replica interesante por lo sintomática y significativa mas que otra cosa, de alguien -que sin duda me conoce bien- que venía a decir (de incógnito) que todo lo que yo atribuía en su calidad de bienhechor del pueblo de Mancha Real al jefe de estado anterior no se debía a él, que todo lo que había innegablemente prosperado el pueblo de mis antepasados aún durante el régimen anterior y antes pues de la transición y de la llegada de la democracia no se debía a Franco sino al Señor Conde, léase el conde de Argillo padre de Cristóbal Martínez Bordiú, marqués de Villaverde, que acabaría esposando a Carmen Franco, la hija del anterior jefe de estado.

Por lo que la discusión habrá acabado centrándose, a modo de colofón, sobre la nobleza o aristocracia (de sangre)à española y sus papel en la guerra civil y en los años del régimen de Franco y su desmarque (oportuno) de aquel pasado (comprometedor) al producirse la transición a imagen y semejanza del que acabaría consumando su jefe natural, el monarca anterior.

Y a vueltas de nuevo con el hueso duro de roer que la figura del inquilino de la Zarzuela no deja de ofrecerme, máxime después de haber decidido como un apuesta entre paréntesis una suepsnison de anteriores juicios míos sobre la persona del monarca -como lo dejé consignado en mi blog de Periodista Digital al poco de producirse el estallido de las primaveras árabes y de la eclosión del movimiento del 15-M (de los indignados españoles), y por vía de consecuencia, un replanteamiento (en profundidad)de la actitud tanto en el foro interno que externo para con él que debe ser la mía -ante el arreciar además de las criticas (perfectamente comprensibles y no poco despiadadas a veces) en mi entorno inmediato-, he acabado topándome con hitos históricos de lo mas esclarecedores en la materia, entresacados, como de un filón o mina inagotable, de la historia de estos Paises Bajos (del Sur, países bajos católicos o "espagnols") donde se encuentra actualmente enclavado Bélgica.
Ceremonia commemorativa -en la Grand Place de Bruselas- del Ommegang, en honor de Carlos V y de su hijo Felipe II, de 1549 (dos décadas antes de que estallase la insurreción protestante por estas tierras) Evoca la tradicion -remontándose al Medioevo y a los Duques de Brabante- de "la entrada triunfal" ("joyeuse entrée") de los nuevos soberanos -marido y mujer- en las villas y ciudades de su reino. Un vestigio inmarcesible de la naturaleza contractual de la monarquia medieval (en España como en los Países Bajos) La Monarquía española tradicional fue tan extraña al constitucionalismo (inglés) como a la figura del monarca absoluto
Y lo son la tradición de la entrada triunfal ("joyeuse entreé" en francés y en neerlandés flamenco "ommegang") del nuevo rey (y su pareja) y en concreto de la que protagonizó Felipe II rey de España y de los Paises Bajos que ejemplificaba históricamente el contrato entre el monarca y sus súbditos (y cortesanos), de lo que se sirvieron de pretexto más tarde los insurrectos protestantes para declarar la deposición del monarca, a sus ojos "ilegitimo" en lo sucesivo (de una ilegitimidad "de ejercicio")

No es ese punto no obstante el que interesa al hilo conductor de lo que aquí decir estoy queriendo, sino esa naturaleza contractual de la monarquía histórica española -ejemplicada en esa "entrada triunfal"- que no fue nunca ni en la fase de la dinastía borbónica una monarquía absoluta. En claro y en crudo no se nos permite exigir a nuestro patriotismo ni a la lealtad debida (en principio siquiera) al jefe del estado tampoco una acatamiento ciego e incondicional. Sino sólamente testimonios de sumisión y de pleitesía estrictamente condicionados o en función de la lista de agravios que muchos españoles arrastramos en el foro interno o también externos por cuenta de la figura del rey Juan Carlos.

Seguiré sin duda -mi palabra- extendiéndome sobre ello pero ya de entrada, cabe mencionar dos temas en lo que nuestra conciencia y nuestro sentido del honor y del patriotismo nos dictan intransigencia y un "non possumus" a saber al ley de la Memoria histórica que deslegitima no solo a los vencedores de la guerra civil sino también al mismo monarca que la habrá promulgado, y secundo, la situación en vías de degradación en Cataluña o en vías de agravamiento súbito en el pais/vasco.

Como no dejará de presentarse la ocasión ineludible de deber plantearlo en público, en las crisis de gravedad extrema del Estado y de sus instituciones que nos esperan como quien dice a la vuelta de la esquina

viernes, octubre 25, 2013

SAVATER PONE EL DEDO EN LA LLAGA

No participé en el combate de Juan Ignacio, me pilló fuera de España como aquí ya saben, no lo conoci a él tampoco -pese a ser los dos de la misma generación- me parece no obstante un deber inexcussble el evocar su memoria, la de la única muerte aún no esclarecida de la Transicion, a la hora en que corremos seriamente el riesgo de que se nos robe una victoria que se habrán labrado calladamente durante cincuenta años los cuerpos armados y una legión innombrable de españoles anónimos y heroicos dentro y fuera del país vasco, buscando ahora algunos el convertir "in extremis" (caveat rex!) una gran victoria en una derrota politica irreparable
Fernando Savater, al que conozco personalmente, es uno de esos antiguos izquierdistas (maoísta incluso) de mi generación -un poco mayor no obstante que yo- con el que no sé si por aquello de a la vejez viruelas o por un proceso recíproco de maduración me siento a veces en lo que escribe y también en sus posturas en publico más o menos en diapasón, como en la última feria del Libro en febrero pasado aquí en Bruselas en donde intervino en una tertulia en el marco del certamen sobre las corridas de toros y se presentó ante el auditorio -un detalle un tanto desternillante que solo descubrí al rato de oírle hablar- con una corbata estampada de toros bravos de lo más original (y taurina)

Y ahora, con motivo de la doctrina Parrot se habrá destapado con nuevas declaraciones y con un articulo en el País de hoy interesante como todo o casi todo lo que escribo y también certero y atinado en su análisis por más que no saque las misma conclusiones que las suyas o no del todo (como siempre)

Significativo no obstante el ligero desmarcaje que se advierte entre sus declaraciones en plena calle como quien dice, nada más darse a conocer el fallo del tribunal europeo sobre la doctrina Parrot como si le hubieran dado un tirón de orejas de donde fuera, porque "del penalty que no existió" del que hablaba en sus declaraciones primeras que nos habría pitado injustamente el alto triubnal europeo habrá pasado a hablar de "un fuera del área" (apenas) todo junto y bien revuelto dentro del mismo articulo. Lo uno o lo otro, maestro ¿En qué quedamos?
Coincidiendo con la presentación de este título de Fernando Savater, asistí a una conferencia que dio en la feria del libro de Brusela en febrero pasado en la que lucía, ufano y sin coplejos, una corbata estampada de toros bravos. Savater (doy fe de ello no sólo de entonces, de mucho antes también, mis primeros años aquí cuando le conocí) es buen comunicador de puertas afuera, pero tal vez sea una excepcion honrosa hoy por hoy entre españoles. Es lo que me viene a la mente leyéndole que "tal vez no hayamos sabido explicar bien" el problema del terrorismo "ni en Europa ni en América" Aunque me temo que -como buen demócrata- haga abstracción de la Leyenda Negra...y también de la hipoteca que nos legó la rebelión mestiza americana
Hay algo no obstante en el articulo incisivo e interesante (ya digo) de Fernando Savater que pone el dedo en la llaga y es su mención de una reunión internacional celebrada recientemente en Méjico y convocada por personas del entorno etarra que habrá conseguido una unamimidad y un eco extraño e inquietante -entre antiguos mandatarios de aquellos países incluso (de izquierdas como de derechas)- por cuenta de la fraseología nacionalista y separatista de siempre (de la que no se desdicen o desmarcan ni una jota) que habrá obtenido la adhesión de ciertos ex-mandatarios americanos fuera de toda sospecha o que así siempre lo parecieron (en el tama que nos afecta y nos ocupa)

"Algo no habremos sabido explicar bien ni en Europa ni en América", se puede leer en el articulo que meciono. Lo cual arrastra innegablemente un poso de verdad, es cierto, por más que no quepa hacer abstracción del problema secular -de imagen- por culpa (en parte) de la Leyenda negra (siempre viva) que arrastramos España y los españoles de puertas afuera. En democracia por definición rige la libertad de prensa y la propaganda gubernamental no existe por propia definición como no existen presos políticos, lo cual no excluye por un lado, que puedan darse casos de criminalización injusta (en nombre o por cuenta del régimen o del sistema democrático) y lo que no borra de un plumazo mínimamente aunque solo sea ese fenómeno de guerra de propaganda que no habremos dejado de presenciar en relación con la agresión terrorista en este balcón privilegiado que nos da el presidir fuera (y mas privilegiadamente si cabe aun en Bruselas)

Hablo un poco por experiencia (en carne viva) en el tema, sí, lo econozco, porque fue eso -esa indefensión (flagrante) española frente a la agresión terrorista, en el plano mediático, de los medios en el extranjero que no vi nunca denunciada en los medios españoles (por lo que fuera)- lo que me reveló, como un espectro o una aparición el llamado caso de las extradiciones (fallidas) de una pareja de etarras -Raquel Garcia Arnanz y Luis Moreno Ramajo- linchamiento al que buena parte de los medios belgas, al unísono con una clase política unánime (salvo alguna excepción honrosa) del lado flamenco se entregaron todos de manos dadas entonces en contra de nuestras instituciones y en tiro de elevación contra España y los españoles y nuestra buena imagen en el extranjero.

Como consecuencia de aquello se produjo una reacción no poco tibia y tímida pero no menos inédita hasta entonces y que de lo que sé no volvió nunca después a reproducirse y me refiero a la iniciativa -que partió creo del ministro de Asuntos Exteriores- de enviar un vídeo a través de las embajadas españolas en los medios sobre la gravedad y la singularidad (sangrienta y sanguinaria) del terrorismo en España y en concreto del perpetrado y practicado por la banda ETA.
Instantánea del putsch de Argel (21 de abril de 1961) En el centro de la foto, el general Salan, más tarde jefe de la OAS, llegado "in extremis" en vuelo directo de Iberia desde Madrid donde se encontraba refugiado bajo la protección del régimen de Franco. Fue la respuesta al inicio de conversaciones secretas entre el gobierno francés y el FLN que conducirían a los acuerdos de Evian once meses más tarde. Una parte del ejército francés de Argelia estaban convencidon que la guerra estaba ganada y que eran víctimas de una maquinación política. ¿ La historia se repite? Caveat rex
¿En vísperas de un nuevo Evian tras la nueva situación creada por la sentencia del tema europeo en contra de la doctrina Parrot? ¡Lagarto, lagarto! para recordación de mi lectores, con aquellos celebres acuerdos se puso fin a la guerra de Argelia, el desenlace de la cual vino a traducir la victoria política de la rebelión argelina y anti-europea con lo que como tantas veces habrá ocurrido en la historia una victoria militar sobre el terreno como la que cosecho el ejercito francés tras la batalla de Argel acabaría saldándose por una derrota en la mesa de negociaciones, por la voluntad del poder político -"in casu" el general De Gaulle- izándose tras la jornada insurrecciona del 113 mayo del 58 en Argel a la cabeza de la Nación y así poder ejecutar sin contemplaciones del principio al fin su programa (inflexible) de descolonización y de entrega y de retirada francesa en definitiva como lo haría

Comparaciones odiosas, porque Argelia (del otro lado del estrecho) no podía ser o no del todo para los franceses lo que las Vascongadas -tierra española inalienable- son para España y los españoles, y tampoco cabe suponer una voluntad de entrega en el poder político, que si esta destapando las horas que corren en el caso que nos ocupa buenas dosis en cambio de cobardía y de falta de visión política y estratégico (a largo plazo)

El fantasma resucitado -de la victoria final de un banda terrorista que parecía derrotada y deshecha- planea de nuevo vivito y coleando sobre la cabeza de los españoles, más si cabe yo diría de los que residimos en el extranjero. ¿Será la reaccion que parece estar incubándose en la opinión publica las horas que corren capaz de conjurarle? Así sea

jueves, octubre 24, 2013

SINDICATO DEL CRIMEN EN SOMOSAGUAS


Javier Verdejo, uno de los muertos en el armario que se saca ahora el Sindicato de Estudiantes sobre la marcha, era hijo de Guillermo Verdejo, alcalde de Almeria con Franco. No fue un caso único (de transbordo ideológico generacional por llamarlo así) Él, como Dulce Chacón, hija del alcalde franquista de Zafra, o Benavides, uno de los abogados laboralistas muertos en Atocha (nieto del general Ordaz) o Restituto Valero de UMD, "el niño del Alcázar", o Enrique Ruano, niño bien de Serrano (del colegio del Pilar) Pío Moa no está de acuerdo -así me lo hizo saber a mí- que España perdió también la segunda guerra mundial en el 45. ¿Qué sintoma o símbolo más cegador de desmoralización colectiva y en suma de derrota no obstante, que aquel fenómeno de abrazarse en masa a las banderas del bando opuesto, de los hijos y descendientes de uno de los bandos beligerantes en la guerra civil, como ocurrió en el tardofranquismo (ya desde finales de los cincuenta)?
¿Para que sirven las universidades? Una pregunta en el aire que se respira desde hace un rato, signo (se diría) del tiempo que vivimos, que cobra de pronto inusitada actualidad con la movilización de la que están siendo teatro los campus y universidades españoles orquestada por el llamado Sindicato de Estudiantes. ¿Para qué me sirvió a mi la universidad de que me sirvió mi paso por ella? Una pregunta a fe mía de difícil e incierta respuesta. No me atrevería no obstante a dar taxativamente la negativa por respuesta.

Es cierto que la universidad de mi tiempo -un poco como la de ahora- era terreno siniestrado o campo de batalla más que otra cosa, en particular -en mis últimos años de facultad- el campus de Somosaguas (hoy como ayer), y que cargamos un poco muchos de mis compañeros de generación en la Universitaria de entonces -de forma inconsciente o subliminal aunque solo fuera- con los deseos frustrados y los sueños y las esperanzas -que proyectaban fatalmente sobre sus descendientes (sus hijos y los hijos de sus hijos)- sin duda un tanto descabelladas vistas desde fuera de las generaciones que nos precedieron, en particular de la de nuestros progenitores, hijos de una época anteriores a la eclosión de las universidades de masas que fue el fenómenos mas tal vez más sobresaliente (puestos a analizar) de la generación que fue la mía.

Así, arrastré toda mi vida títulos universitarios -que no me regaló nadie, a costa del tiempo y del esfuerzo que le dediqué y también del sacrificio económico de los míos- con el sentimiento intimo y frustrante no obstante que no me habían valido la pena o que no me habían servido (prácticamente) para nada, y con un innegable sentimiento de inferioridad ante otros que sin títulos o sin tanta graduación o titulación como la mía habían encontrado de seguida -algunos de ellos mientras yo me debatía en la Universitaria aquella, siempre en medio de la tormenta- su puesto o su camino en la sociedad en los ámbitos laboral y profesional me refiero, por el que acabarían avanzando despacito y buena letra o ascendiendo a pasos de gigante algunos de ellos, y con la sensación también que la vida les había madurado a ellos más (y mejor) sin ese contacto como fue el mio con el ámbito universitario que tanto tuvo de traumatizante y empobrecedor (desde ciertos puntos de vista) como lo habré dejado sentado a menudo en mis escritos.
Una historia del SEU con un capítulo particularmente brillante y heroico, el de la División Azul. Su autor, del SEU heroico de la II República, acorde a testimonios concordantes que me llegaron en su momento no se dejó arrastrar por los cantos de sirena del tardo/franquismo y permaneció fiel a las lealtades, juramentos -y antagonismos- de sus tiempos de divisionario en Rusia (contra el comunismo)
Todo eso es cierto, lo pensé y lo sigo pensando, y sin embargo (...) No me arrepiento, no, asumo mis años de paso por la universidad por la experiencia tan fuerte para bien y para mal que para mí representaron, y sobre todo porque me dejaron -como señal de ungido- un afán (inmenso) de saber que me habrá acompañado toda mi vida y que tiene no poco que ver sin duda con esa pulsión memorística y un tanto grafómana tal vez (no sé) -que tanto parece intrigar a algunos-, y de la que habré dado tantas muestras desde que me puse a escribir en público y a diario como llevo haciéndolo ya desde hace unos cuantos años.

Como sea, las universidades siguen siendo fabricas de cerebros para la sociedad que las ve nacer en su seno y augura mal desde luego de un país, de una sociedad, de una civilización el que ese estamento tan crucial y tan critico a veces entre de pronto en crisis como ocurrió en mayo del sesenta y ocho, y como vendría a ocurrir -aunque de forma menos directa o más tangencial- con el movimiento de los indignados hace ahora dos años y medios de los que la agitación que están viviendo las horas que corren los campus españoles no vienen a ser -a mi juicio- mas que una de sus últimas secuelas o coletazos.

El Sindicato de Estudiantes, la organización (única por lo que parece) por la que llega ahora otra vez el ruido y el escándalo, que viene orquestando la agitación estudiantil, ahora y supongo que desde hace ya un buen rato -y hablo por conjeturas porque como todos aquí saben o se adivinan llevo una eternidad alejado de la Universidad española y de sus ambientes y cenáculos- arrastra un nombre cargado de resonancias aunque solo sea. En mi época el sindicato con vocación hegemónica lo fue "el Sindicato democrático de estudiantes" -conocido en Madrid con las siglas de SDEUM- del que el actual sindicato cabe suponer que sea el heredero natural por más que haya dejado caer el epíteto (como una apelación o marca de origen) de "democrático", que como el valor del soldado en las ordenanzas de Carlos III, se diría que hay que suponerles o sobreentenderles.
El enterrador mayor del SEU lo fue uno de sus fundadores, Dionisio Ridruejo, principal instigador de la revuelta estudiantil del 56 (sucesos de San Bernardo), modelo matricial u original de la que vendría a prender una década más tarde. En el 56, tuvo en frente suyo a un joven falangista auténtico (y ardiente, entonces) Francisco Umbral, colaborador estrecho de Juan Aparicio, como el propio interesado lo da entender -en clave autobiográfica un tanto complicada de descifrar- en su novela guerracivilista "Madrid 1940" La hostilidad a penas disimulada que Umbral reservó siempre en sus libros y escritos a la figura del célebre falangista disidente venía de allí precisamente
También podrían ser vistos -por la vía de la filiación espúrea e ilegítima (léase no reconocida ni asumida tampoco, ni en todo ni en parte)- como retoños del otro sindicato ("español) de estudiantes, el SEU, la rama universitaria de la Falange, que perduró en el franquismo en fase languideciente tras el final de la segunda guerra mundial y que se vería enterrado con los sucesos de San Bernardo (febrero del 56) aunque sus certificado de defunción vendría en el tardo/franquismo sólo, una década más tarde. Hijos putativos del SDEUM de mi época o descendientes biológicos en cambio del SEU falangista, está claro que este sindicato de estudiantes escogiendo o apostando por la vía de la confrontación y de la recuperación de la memoria de los vencidos se cierra fatalmente las puertas del futuro, a largo y corto plazo.

Como lo ilustran las pancartas (tan aparatosas) que sacan ahora a relucir en sus manifestaciones -contra "la contrarreforma franquista en la educación" (léase la LOMCE del ministro Wert)- y sobre todo esa querella que acaban de interponer -en plena movida de agitación- delante de la juez argentina (de la que ya me ocupé no hace mucho en este blog) que aceptó las querellas de los llamados "crímenes del franquismo", con lo que destapan el mismo signo -o sello -de manipulación ideológica- de la que adolecieron sus antepasados ideológicos (los de mi época)

Banda de delincuentes (políticos), esa es la imagen que da el (denominado) "sindicato de estudiantes" Sobre todo -a tenor de las escenas que nos están llegando por la red- en el campus (¡ay dolor!) de Somosaguas

miércoles, octubre 23, 2013

VÍCTIMAS DE LA ETA VUELTA A LAS MASCARADAS

Melitón Manzanas, primera víctima reconocida de la ETA. Un patriota y un policía ejemplar. Piedra de escándalo a la vez del régimen democrático. No fuimos nosotros los "fachas" (para entendernos) los primeros que empezaron distiguiendo entre unas víctimas y otras, fueron ellos, los partidos democráticos, los que se sirvieron de aquél o más bien de la leyenda negra que le seguía después de muerto a sol y sombra los que lo hicieron, reformando -en su artículo 4 (hasta hoy)- la ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo, por donde excluían implícitamente -aunque a Melitón Manzanas no pudieron aplicárselo a título retroactivo- las víctimas de la ETA asesinadas durante el régimen de Franco
¿Vuelta a empezar los tubos de escape de aquellas movilizaciones ("victimistas") que acompañaron sin frenarla u obstaculizarla en lo más mínima la caída a tumba abierta, hacia el abismo, de los años de la era Zapatero? Y me refiero a los dos tipos de movilizaciones de masa que prodigó todo ese tiempo la derecha (léase el PP) con la cooperación y el beneplácito y todos los níhil óbstat habidos y por haber, de la jerarquía eclesiástica y de sus correas de transmisión a lo largo y a lo ancho del territorio patrio y en amplios sectores y a todos los niveles de la sociedad española, a saber las movilizaciones masivas -como solo los engranajes y los resortes de los que el aparato eclesiástico o el de los grandes partidos politicos (democráticos) disponen son capaces de poner en marcha- que se resumían fatalmente en dos tipos o variantes, respectivamente las manifestaciones contra el aborto, y por los derechos de las víctimas (del terrorismo, se sobreentiende).

Con motivo de la jornada del 12 de Octubre en Barcelona y de la concentración de Montjutich en la que participé entusiasta como aquí todos ya saben, surgió una discusión en el marco de la plataforma "la España en Marcha" organizadora de aquél en la que se vino atinadamente a sentar la distinción entre unas victimas y las otras, entre los que cayeron en defensa de la unidad de España frente al separatismo y los que fueron por razón de sus compromisos más o menos turbios o confusos con el régimen (o sistema) democrático que alumbró entre otras criaturas mostrencas o abortivas, las autonomías vasca y catalana.
Escena del film "La batalla de Argel" En la foto, el protagonista que interpretaba la figura del general Massu. La guerra de Argelia puso palpablemente de manifiesto la contradiccion irreductible e irresoluble entre la defensa del Orden y de la Civilización frente a la agresión terrorista, y el ideal democrático, como ocurriría igualmente en el combate contra el terrorismo de la ETA en las Vascongadas
Policías, militares guardias civiles, defensores por definición de la Unidad de la Nación y del Orden (con mayúsculas) y políticos y diputados de los partidos democráticos puestos todos bajo el mismo rasero o común denominador de víctimas de la violencia "venga de donde venga" Con lo que se venía a caer fatalmente en la amalgama entre los verdaderos terroristas y los que les combatían por puro patriotismo -y violentamente (¿como si no?)- al margen del ideal democrático, como fue mi caso y el de otros muchos.

No conozco o no estoy al tanto -vaya dicho de entrada- de la situación exacta en el país vasco las horas que corren y por consiguiente me auto/impongo un bemol por razón de fuerza mayor como quien dice a la hora de a abordar una tema -el de las víctimas del terrorismo- en estrecha relación con la situación (desde esa óptica) en aquella región española.

Y sí dispongo en cambio de un barómetro sensible y fidedigno en extremo en este balcón privilegiado de Brusselas y de Bélgica en su conjunto donde resido que no dejó de ser campo de batalla o línea de frente también en el combate anti-ETA desde los inicios prácticamente de la organización terrorista, y del que tuve siempre conciencia, desde los primeros años de mi estancia aquí y en particular desde que estalló el célebre escandalo de la extradición fallida de dos presuntos etarras refugiados en Bélgica -a medidos de los noventa-, de estar ocupándolo (prácticamente) en solitario.

La línea del frente internacional del combate anti-ETA, la que pasaba por Bélgica y Bruselas por lo menos, dejó de estar activa -en eso creo poder ser categórico- grosso modo desde los atentados del 11 de marzo, como si hubieran perdido (irremediablemente) entonces la batalla de la opinión pública (francófona y no sólo) como si con las víctimas (inocentes) de los atentados de Atocha el precio (en sangre) del rescate -o de la expiación- se hubiese hecho efectivo (por completo en lo sucesivo. Me refiero el precio de sangre, que el otro, el precio político lo pagaron (justificadamente o no) otros como aquí todos ya saben

¿Figuraciones mías lo que precede? No lo creo, la actitud de los poderes públicos en Bélgica hacia la ETA y sus miembros cambió radicalmente desde entonces y de hecho se empezó a aplicar hasta hoy la tolerancia/cero, como lo ilustraría la extradición (fulminante casi) de varios miembros de la ETA que pretendieron repetidamente, en el nuevo clima del periodo que se abrio a seguir a aquellos atentados, encontrar refugio en Bélgica, y sobre todo la actitud de la opinión pública hacia España y los españoles y en general en relación con el fenómeno del terrorismo de la ETA cambió radicalmente. Como si se hubiera puesto fin a la hora/vasca que duraba ya aquí desde hacía décadas y en todo caso desde que yo puse aquí el pie por vez primera (segunda mitad de la década de los ochenta)

Como si los españoles en su conjunto hubieron pasado de repente en la mente de los belgas -y pari passu sin duda también en otros países europeos- a poder revestir ellos también el estatuto de víctimas, algo reservado hasta entonces -tratándose de España y los españoles- a vascos y catalanes (sobre todo a vascos), lo que se vería traducido en un cambio sensible de actitud y de trato (en mejor) hacia nosotros que me fue confirmado por otros españoles aquí residentes. La sentencia del tribunal europeo de los derechos del hombre se habrá visto seguida en cuestion de horas de la excarcelación dos figuras emblemáticas -de las más sanguinarias- de la banda terrorista, una en España y otra en Inglaterra, lo que habrá ofrecido el pretexto que ni pitado para el arrancar de nuevo de toda la maquinaria de movilizaciones del victimismo democrático organizado (y mido mis palabras) Y volveremos a ver las mismas consignas de siempre en los de siempre. ¡Capitanes de derrota!

A la ETA la habrán combatido eficazmente hasta obligarla a suspender sus campañas de atentados sangrientos los cuerpos armados y también el patriotismo de muchos vasco/españoles anónimos. La clase política y sus correas de transmisión en las instituciones del estado no habrán hecho nunca en cambio -salvo honrosas excepciones- más que darles balones de oxígeno. Existe un victimismo profesional en la clase política como existe (de antiguo) un anti-terrorismo profesional y no me refiero al GAL o no sólo a ellos.
En la foto, a la salida de la sala del tribunal en Bruselas -mayo del 2002- que me condenó a cuatro meses de cárcel por "un delito de rebelión" -mi acto de protesta delante del Palacio Real en mayo del 2000- y me absolvió en cambio por falta de pruebas de la acusacion de incendio voluntario contra la sede de HB en Bruselas (febrero del 96) En mi combate (en solitario) contra la ETA en Bélgica tuve siempre que cargar con la incomprensión del victimismo pacifista y democratico de "la Coordinadora por la Paz" (eurofuncionarios españoles de los partidos democráticos, incluído el PNV) que no dudaron en acusarme (hipócritamente) ante la policía belga -célula Anti-Terrorrismo- e hicieron innegabemente presión para mi inculpación judicial en los tribunales aquí, de la que fueron cómplices
Y un ejemplo (mas elocuente que todas las palabras) de lo que aquí decir estoy queriendo me lo ofrece el caso de un miembro de la escolta de protección de la Embajada de España en Bruselas (o así me pareció a mí que ejercía por lo menos) que "sobrevivió" a todas luces -guardando su (apetecible) destino quiero decir- a los atentados del 11 de marzo y la llegada al poder de los socialistas y que dirigía -desde los inicios de la era Aznar- el servicio de orden en las concentracciones aquellas de tres minutos (tres) de silencio -y vuelta a casa sin rechistar- de duelo por las víctimas de la ETA en el barrio de las instituciones europeas y que estuvo a punto de llegar a las manos conmigo -que no me achanté- si no hubiera sido por la intervención rápida de agentes de la policía belga. ¡Pesadilla de guardaespaldas democrático el individuo aquél (policía nacional o guardia civil en activo o en situación de retiro, o agente de seguridad apenas o lo que fuera) !

"Estos son peores que los otros!", le oí decir refiriéndose a mí, -la primera vez que le vi de improviso (como un recién llegado) en aquellas concentraciones pacifistas (anti-ETA)- "¡hay que echarlos de aqui a patadas, a patadas!" le oí farfullar a los oidos del embajador Benavides (del PP) alla por la segunda mitad de la década de los noventa.

Y ahora con el reanudar de la manifestaciones victimistas, no lo puedo remediar, me parece verle de nuevo buscando siempre a ocupar todo el espacio o la escena, como un advenedizo -como hizo siempre aquí en Bruselas- de mascarón de proa o de figurón en primera fila. Y a fe mía que no veo más que a él, y que se piense de mí lo que se quiera)


ADDENDA (URGENTE) Hago partícipes a mis lectores de la convocatoria para mañana en Madrid que me acaba de llegar, de la Plataforma "España en Marcha" en contra de la excarcelación de etarras (de resultas de la sentencia del tribunal europeo sobre la doctrina Parrot) bajo el lema "Ni un etarra más en libertad" que hago enteramente mío por supuesto

martes, octubre 22, 2013

MOURINHO ANTI-ESPAÑOL

Khedira (de padre magrebí), o el complejo de culpa alemana. ¿Tendremos que vernos tildados forzosamente de racismo por ponernos a subrayar la distancia abisal entre la exigencia de igualdad y de ausencia de discriminación de las legislaciones en vigor en nuestros países de la UE, entre nacionales y extranjeros residentes y la realidad flagrante del éxito, asegurado de antemano se diría, -y claramente discriminatorio- que se merecen los nacionales alemanes de padre extranjero/musulmán y de madre alemana (y no viceversa)? Un fenómeno que se da también aunque en menor medida en otros países de la Unión Euroepa
Confieso que las declaraciones de José Mourinho a la prensa inglesa sobre España y los españoles me han sorprendido (desagradablemente) un poco, no me las esperaba, pensé que su paso de tres años por el fútbol español en las filas del Real Madrid se soldaba de una forma contrastada entre lo positivo y lo negativo, pero perfectamente honrosa y sin agravios mayores por ninguna de los dos partes.

Como así parecían dejarlo a entender declaraciones del que fue su mentor y padrino en el club blanco, Florentino Pérez, poco después de su marcha. Un portugués en el Real Madrid tratándose además de una figura tan emblemática y de aristas tan marcadas como el ex-tenico portugués madridista que no dejaba nunca a nadie indiferente a favor o en contra, era un episodio nada trivial en la historia del fútbol español y traducía a la vez un fenómeno de sociedad que habrá marcado no poco la vida española en su día a día -los fines de semana sobre todo- en los últimos años.

No me dejó indiferente la llegada de Mourinho a mí tampoco de entrada, y me pusieron en guardia -para que lo iria a negar aquí- declaraciones suyas tras el anuncio de su fichaje por el club madridista en las que profesaba abiertamente sentimientos de veneración por la figura del papa Juan Pablo II, uno de los personajes más grandes (si no el que más) para él, del siglo XX. Lagarto, lagarto, me dije ya de entrada (y no me lo tomen a mal aquí algunos) Hubo no obstante un punto de inflexión en mi actitud hacia él -en la que no siendo forofo (aún siendo madridista de nacimiento casi) del futbol actual, predominaban más bien sentimientos de indiferencia- y fue el gesto de humor no poco genial que tuvo en el terreno del juego y al final de uno de los encuentros al que asistió (desde el banquillo) metiendo o haciendo ademán de meter el dedo en el ojo al técnico azulgrana Pep Guardiola.
Franco (gallego) y Salazar, portugués norteño (de Santa Comba Dâo) se entendían bien. Entre portugueses y españoles las cosas fueron mejor de antiguo a nivel de las élites que del pueblo llano. Habia peleas y disturbios en los partidos de fútbol entre pueblos limitrofes fronterizos (como se quejó Mocardó a Hitler en el búnker durante la segunda guerra mundial), pero en la buena sociedad todo discurría como la seda de un lado y otro de la frontera. El problema Mourinho -y no un problema hispano/portugués cualquiera- es un tanto atípico, como lo confirman las palabras de Cristiano Ronaldo que se siente bien entre españoles y que acaba de desmarcarse de las declaraciones de su antiguo entrenador en el Madrid
Para un portugués -y no me lo tomen tampoco a mal los portugueses que me estén aquí leyendo- el rasgo de humor no está nada mal, me dije para mis adentros comparándolo instintivamente a mi experiencia de los tres años y medio vividos en Portugal (preso) en los que a fe mía que descubrí pocos rasgos de humor en torno mío como si el humor en lengua portuguesa se hubiera escapado hacía mas de un siglo del otro lado del Atlántico tal y como pareció confirmármelo el pequeño botón de muestra de una serie de telenovelas brasileñas que nos ofrecían por la pequeña pantalla en los ratos (cortos) de recreo al final de la jornada en el establecimiento de máxima seguridad de Vale de Judeus, que provocaban la hilaridad entre paréntesis de mis compañeros de reclusión portugueses la mayoría (y también en el que esto escribe desde luego) Como si el brasilero guasón (de preferencia carioca) y el portugués lacrimógeno y tristón formaron la dos caras de la moneda de la idiosincrasia lusa o luisiada o lusitana a escala del planeta.

Mourinho me hizo reír pues, pero ahora se me habrá atragantado fatalmente la risa con unas declaraciones suyas -a la prensa inglesa además- que vienen a despertar o a soliviantar todos los viejos fantasmas que rodean o gravitan de antiguo en las relaciones entre los dos países ibéricos. Inglaterra y Portugal, la alianza más vieja de Europa, así lo oí celebrar en los medios y a mi alrededor cuando la visita de la reina de Inglaterra a Portugal en el 84 estando yo allí aún preso. Y la cosa viene -a titulo de recordación o de apunte histórico- de la guerra de los Cien Años y de su desenlace, o sea que ya viene de lejos y que no se limita a un simple "accidente" como opinaba Serrano Súñer en sus tiempos de de gloria desde las altas esferas del régimen de Franco en la guerra y en la inmediata posguerra. ¿Si en vez de ser aragonés de ascendencia hubiera sido gallego o proveniente de la España del Noroeste se hubiera expresado de la misma forma el Cuñadisimo? Cabe preguntárselo.

El desgaje de Portugal iniciado con el ascenso al trono de la monarquía castellana de los Trastamara y confirmado siglos más tarde en tiempos de Felipe IV y en el contexto de la guerra (europea)- de los Treinta Años fue sin duda un accidente histórico, y fue no obstante a la vez también un fracaso recíproco en la aspiración a la unidad que prosiguieron durante toda la reconquista los reinos cristianos de la Península. Y la herida ahí sigue a no dudar por muy cicatrizada que parezca y cuando se toca duele, como habrá ocurrido ahora en el episodio Mourinho y con ocasión de sus declaraciones tan anglófilas y también -hay que reconocerlo- un pelín anti-españolas.

Mourinho dice ahora que en España -debe hablar sobre todo por lo que courre en los terrenos de juego- se respira odio al portugués, y es, a creerle, a tenor de los insultos (frecuentes por lo que cuenta) que le llovieron y llegaron a sus oídos durante su estancia entre españoles. Es posible, pero cabe apostillar de inmediato que de existir o de responder a una realidad el reproche que Mourinho nos hace, no deja de ser recíproco, porque el que esto escribe podría permitirse todo un libro recogiendo y narrando sus experiencias bajo ese prisma los años que me deparo la suerte de tener que cohabitar -en unas circunstancias especialísimas y completamente atípicas lo reconozco- entre portugueses. Aunque en lo que me atañe puedo decir no obstante que la sangre no llegó nunca (o casi nunca) al río.
No me entró a mí nunca ese golpe de cabeza, lo confieso, ni tampoco -estoy seguro- a muchos españoles. Problema Zidane: de sus orígenes franco/argelinos -el que les plantea a muchos franceses-, de sus opciones políticas de izquierdas, anti-fascistas, de su esposa oriunda, de Almería, (él habló sin rebozos de "la mar de Al-Andalus de su esposa española") y de los nombres italianos de sus hijos. ¿Por qué italianos? ¿Acaso para ocultar en la calle, fuera de casa, otros nombres musulmanes (autenticos y no de pega)?
¿Racismo anti-portugués entre españoles, para expresar en claro y crudo lo que parece querer decir en sus declaraciones recientes José Mourinho? A la medida del racismo anti-español que pueda existir entre españoles y que caso de existir no harían más que alimentarse recíprocamente el uno y el otro. Como sea, el racismo mas o menos latente o subliminal no deja de gravitar en la actualidad futbolística en la medida que el deporte de masas y el fútbol tal vez más que en ninguna otra rama deportiva no deja de ser escenario privilegiado donde se repercuten y reflejan todas las tensiones del mundo actual en sus facetas o episodios más problemáticos o conflictivos (y explosivos) como lo es la invasión silenciosa del continente europeo por una inmigración (particularmente) de confesión musulmana en el contexto de un choque de culturas entre el Islam y la civilización occidental y europea.

Tal y como lo ilustran la presencia y proliferación de jugadores de origen musulmán inmigrante en los grandes equipos europeoa. Zhidane, Ozül, Khedira son sólo un pequeño muestrario de nombres que me viene de improviso a la mente de lo que decir estoy queriendo. Y no sólo ellos sino otros europeos de origen, y que no dejan de verse asociados fatalmente a ese fenómeno como el francés Ribery -de un físico inconfundible por las quemaduras que surcan su rostro- converso al Islam y no de lo mas discretos desapercibidos en la medida que pareció hacer siempre de ello una tarjeta de visita, o a mí así me lo pareció siemre al menos.

Khedira, alemán de nacionalidad de padre tunecino y de madre alemana, y capitán de la selección (como buen ahijado de mamá Merkel) -¡si el Innombrabe levantase la cabeza!- declara ahora, tras las declaraciones de Mourinho, sentirse chivo expiatorio en el Madrid tras la marcha del técnico portugués del que se confiesa discípulo. Al contrario de lo que acaba de declarar el igualmente português Cristiano Ronaldo. Mourinho anti-español o la fatalidad española -lo quieran o no- de algunos portugueses (y de sus discípulos extranjeros)

lunes, octubre 21, 2013

ALBERTO GARZÓN, IZQUIERDISTA E INDIGNADO, AMENAZADO EN LA RED (donde las dan las toman)

Criatura política de Aznar o no, me niego a condenar a Jaime Mora, el joven militante de las Nuevas Generaciones del PP que acaba de ser expulsado del partido (o eso anuncian) por sus amenazas a Alberto Garzón en la Red. ¡Basta de actitudes traidoras e hipócritas!

Alberto Garzón diputado de Izquierda Unida no es un diputado cualquiera ni siquiera un diputado de Izquierda Unida cualquiera, sino una de las figuras emblemáticas del 15-M que tras la indefinición o inhibición de la que dio muestras ese colectivo en en el plano electoral los meses que siguieron a su fundación acabó presentándose candidato por las listas de Izquierda Unida en Málaga en las elecciones de octubre de aquel año y tras verse elegido se convertiría en el portavoz natural y oficioso a la vez del 15-M en el Parlamento con lo que las aguas volvían a su cauce como quien dice o cada mochuelo a su olivo como dicen en Andalaucía (y como debe saberlo bien el interesado)

Aunque en parte sólo, porque la capacidad de distorsión y de tergiversación y manipulación de ese movimiento de jóvenes manipulados -igual o más que lo fueron sus antepasados ideológicos de mayo del 68 con los que se identificaron claramente en la fase de incubación del movimiento los meses que precedieron a su lanzamiento (en mayo del 2011)- siguió haciendo estragos hasta hoy mismo -aunque en ritmo e intensidad decreciente- entre amplios sectores de población, jóvenes pos-graduados y universitarios sobre todo, en la medida que sus campañas de agitación conseguían borrar no poco cualquier huella o rastro de identificación y de definición y deslinde ideológicos entre los unos y los otros (léase entre izquierdas y derechas)

Como un renacer -en versión actualizada- del mito de la (gran) Noche de la Revolución (le Grand Soir) que puso de moda el mayo francés y que tuvo cumplida aplicación el Barrio Latino -en el centro de la capital francesa- a cargo de insurrectos de fuera del estamento estudiantil muchos de ellos -como el grupo de los Katangueños, dueños y señores de de la Sorbona ocupada, y del teatro del Odeón- que protagonizarían en los pocos días que duró la intentona un espectáculo de anarquía y de desmanes increíble en un decorado de mugre y falta de higiene personal que los indignados de la Puerta del Sol, más de cuarenta años después, supieron a fe mía emular los días que duró su acampada.

De noche todos los gatos son pardos, o grises como dicen los franceses, y esa atmósfera de confusión ideológica -y pari passu de mugre espiritual y física generalizada- fue lo que más me marcó -por la vía por supuesto del rechazo- del mayo del sesenta y ocho en su versión española y más me aisló y más contribuyo sin duda al enroque psicológico (e ideológico) que fue el mío a partir de entonces- como lo tengo aquí y en otros sitios ya no sé cuantas veces contados, -en mi libro editado en francés "Le fou de Dieu" entre otros- y como lo ilustra la imagen en el recuerdo de testigos presenciales recogida en testimonios recientes en la red, en una visión divergente por completo de la mía por supuesto.
Recital de Raimon en Económicas (y Políticas) de la Complutense en mayo del 68 al que asistí y del que me salí furioso y frustrado -ante la incomprensión que me mostraron los que me acompañaban, y por la politización y la radicalización ideológica que se produjo allí dentro- antes de que terminase. Mayo del 68 en versión española hipotecó pesadamente nuestro futuro (hasta hoy) Mucho más de lo que una inmensa mayoría se imagina. Sin él, otra transición hubiera sido posible
Algo que alcanzó niveles de paroxismo en el recital del cantante valenciano (y catalanista) Raimon en la antigua facultad de Políticas y Económicas de la Complutense en la tarde de sábado (como si sucedió ayer) del 18 de mayo del sesenta y ocho cuando se dio un fenómeno -así lo vi yo- que tanto hipotecaría el futuro inmediato de los españoles (hasta hoy) de cristalización ideológica (a la izquierda extrema) de la masa de universitarios asistentes al acto ( unos seis mil) (...), apolíticos o de orientación opuesta incluso hasta hacía poco muchos de ellos -e hijos o nietos de los vencedores de la guerra civil también no pocos de ellos por descontado- emulando todos al final puño en alto al autor del recital (¡menudo agitador!) del que en el plano artístico se volvería a oír poco (entre paréntesis)

Como hipnotizados por la imagen innegablemente ideológica y catalanista y guerra civilista -en catalán (o valenciano), casi todo (o todo) lo que cantó- que se desprendía del personaje. Allí precisamente -lo tengo ya no sé cuantas veces declarado - me curé para siempre de las veleidades contestatarias que había compartido hasta entonces contagiado como tantos y tantos de mis compañeros universitarios.

Por lo que los que aquí me leen vendrán sin duda a comprender en parte un poco la visión espectral como un aparición de pesadilla -tan traumática o traumatizante- que fue para mí la eclosión del movimiento indignado en mayo del 2011 como no dejé de dar constancia puntual de ello en una serie interminable de entradas que dediqué al tema en mi blog de Periodista Digital (hasta que me vi dado de baja) y como no habré dejado de darlo a traslucir sin duda entre líneas de mis artículos y entradas en la Red desde hace dos años y medio, para mis lectores más sagaces por lo menos.
29 de mayo del 68. En lo más álgido de la crisis del mayo francés, De Gaulle se entrevista de incógnito en Baden-Baden con el general Massu, comandante en jefe de las tropas francesas de ocupación en Alemania justo antes de su vuelta a París para retomar el control de la situación. Pocos días después saldrían de la carcel indultados los altos mandos de la OAS. De Gaulle sacrificó la Argelia francesa a su política exterior (anti-Alianza Atlántica) pero sirvió innegablemente de dique en el 68 contra el caos (la "chienlit" como él decia) y la amenaza soviética. Mutatis mutandis, el rey Juan Carlos sin duda a su pesar sirvió de barrera frente a "la spanish revolution" de los perroflautas e indignados del 15-M, patrocinada y teledirigida por el mesías negro Obama (y su lacayo español José Luis Zapatero)
Aunque también comprendo que los que no tuvieron aquella vivencia por pertenecer a una generación más joven que la mía (aunque solo fuera un poco) y haber llegado tarde (por lo pelos aunque fuera) a ese momento cronológico tan crucial y decisivo de nuestra historia contemporánea no estuviesen y siguen sin estar en medida de calibrar del todo el desafío aquél idéologico tan terrible, de vuelta cuarenta años después, en mayo del 2011. Se deja engañar sólo el que quiere, reza también el refrán no obstante, y para algunos esa excusa de la edad no cuenta, en modo alguno. Y se puede decir que acabaron abrazando el 15-M y su ideal subversivo e insidioso de cochambre física y espiritual, y disgregador y en el fondo islamizante y anti-español, porque era eso lo que les pedía el cuerpo y lo que en el fondo iban buscando

Y por eso ahora ante el mensaje doble o triplemente insidioso -contra el "odio" que destila según él la legislacion anti-terrorista en vigor- que el joven diputado indignado (de IU) acaba de colgar en la red por cuenta del fallo de tribunal europeo de los derechos del hombre sobre la doctrina Parrot, me siento en la imposibilidad moral de condenar el mensaje (de amenaza) que le habrá dedicado un joven militante de las Nuevas Generaciones (del PP) que se habrá visto (faltaría más) descalificado por su partido de inmediato. Lo que le habrá abierto tal vez los ojos, libre de ataduras. "Eran mucho peores -reza el texto bíblico- de lo que imaginarte podías" Lo dicho, donde las dan las toman.

Doctrina Parrot. ¡Aparte de mí ese cáliz! Y me refiero a le pereza invencible casi que me acomete poniéndome a disertar o a dar mi opinión por breve y somera que sea sobre ese tema. Por arduo y extenso sin duda el trabajo de clarificación que exige. Como lo exige a su vez la temática de las víctimas -el distinguir entre unas víctimas y las otras- o esa otra aún mas candente y urgente de la legitimación de la violencia dela que me ocupé en una entrada recientemente en el marco de la polémica, que habrá estallado -sobre esos dos temas- al interior de la plataforma España en Marcha los últimos días (¡y en buena hora_)

Porque me parece no menos urgente el distinguir entre estrategia del combate anti-terrorista -"in casu" de la lucha anti-ETA- y la temática de la política penitenciaria, que tiene con aquella una relacion secundaria y encierto modo indirecta. ¿Pena de muerte contra terrorista y violadores de derecho común (todos juntos bien revueltos) o prision de por vida (o penas incomprensibles como le dicen los belgas)? Por mí que no falte...A condición que toda esa oferta al mejor postor -los franceses le dicen "surenchère"- en materia de rigor penal y penitenciario no acabe volviendose hipócritamente contra los verdaderos anti-terroristas como me cupo experimentarlo (¡ay dolor!) en propia carne en mis años de estancia en bélgica. Y quien pueda entender que entienda.

En claro y en crudo para los de difíciles entendederas: ningun miembro de la ETA de los muchos que econtraron refugio de incógnito o a las claras por estas tierras belgas durante décadas tuvo que sufrir ni de lejos (ni de broma) las penalidades penitenciarias -y las miserias judiciales- que se me impusieron a mí en mis anos de residencia (veintisiete ya) en Bélgica

domingo, octubre 20, 2013

Canto de amor y de guerra (poesía en domingo)

¡Gloria a los húngaros aquellos
de un pueblo de descendientes
de aquellos hunos de Atila
que supieron luchar y morir
-cerco soviético de Budapest
("el segundo Stalingrado")
codo a codo con los arios
por la salvacion de Europa
siempre leales hasta el fin
mientras fundía a pleno sol
o al fuego de la metralla
la división entre dos pueblos
y entre dos razas (blancas)!

¿Guiarnos por postulados
viejos, nuevos, buenos, malos?
En este mundo tan traidor
mezcla de verdad y apariencias
a la hora de la verdad
(de atarnos fuerte al futuro
y de forzar el destino
y redimir el pasado)
la intuición es la que cuenta
Y es lo que rije al profeta
buscando a tientas, a ciegas
en la noche de los tiempos
el hilo de Ariana de la Historia
en el campo de batalla
-y en el choque de memorias-
de nuestra historia española.
¿Pifia aquella Blau Division?
¡El capítulo europeo
al revés, más glorioso
y reciente y siempre vivo
de nuestra historia azarosa!:
ni una palabra ni un gesto
entre aquellos que volvieron
-ya fueran fachas o rojos
cuando la guerra civil (la nuestra)-
se notaría en sus rostros
o saldría de sus bocas
(aparte el traidor Ridruejo)
contra sus compañeros de armas
en aquella grande epopeya:
el homenaje a un pueblo
amigo y enemigo (a rachas),
nobleza obliga y clase
(¡el sello de nuestra raza!)
Que nos honraron entonces
cuando Europa rompía albores
con un puesto en la batalla
¡La santa/alianza aún viva
de dos pueblos...de dos razas!

Refrán

Y eso fue lo que me atrajo
en un principio de tí,
monstruo, mujer terrible,
inconstante y caprichosa:
¡Ese lazo incierto e "impuro
-en tí como también en mí-
de una ascendencia alemana!